Una de las cosas que más me gusta de la panificadora, además de tener el pan recién hecho por las mañanas, son las mermeladas.
Antes de ponerme con ellas, yo era solo de mermelada de melocotón y no todas: no me gustan los dulces excesivamente dulces, no me gustan los tropezones, no me gustan los conservantes… panorama complicado, satisfacerme a mí 😉
La solución, claro está, es hacer tus propias mermeladas (y muchas otras cosas) y, por supuesto que se pueden hacer a la forma “tradicional”, pero si tienes una panificadora, te ahorras tiempo. En realidad, te ahorras estar pendiente de la mermelada durante el proceso de elaboración porque es probable que el tiempo que se tarde en hacerla sea más o menos el mismo.
Así que aquí me tenéis, haciendo diferentes tipos de mermeladas según la fruta de temporada. Que es, por cierto, una magnífica forma de conservarla durante más tiempo y poder consumirla cuando se supone que ya no toca.
En esta ocasión he tirado de las ciruelas claudias, una fruta que me encanta y que, como casi todas las frutas de verano, tiene una temporada muy corta. He querido darle un toque ácido porque las ciruelas ya son dulces de por sí y no quería que quedara una demasiado dulce al añadirle el azúcar del que tampoco quería prescindir porque es el agente que actúa como conservante en el caso de las mermeladas.
Receta de la mermelada de ciruelas al toque de lima
- 500 gr. ciruelas claudias (pesamos la fruta después de lavarla, de quitar el rabito y deshuesarla)
- 250 gr. de azúcar
- 1 lima (ralladura y zumo por separado)
Cómo hacer la mermelada de ciruelas al toque de lima con panificadora:
- Seleccionamos el programa de mermeladas. En cada panificadora tendrá un número. Ponemos la máquina a funcionar y añadimos el zumo de lima con la mitad aproximadamente del azúcar.
- Mientras se va haciendo el almíbar, vamos preparando la fruta: la lavamos bien, la deshuesamos y la cortamos en trozos más o menos pequeños.
- Añadimos la fruta, el resto del azúcar y la ralladura de la lima a la cubeta de la panificadora y dejamos que termine el programa.
Nota: la panificadora no tritura, así que es mejor echar la fruta en trozos pequeños. Si os gustan más las mermeladas sin tropezones, como a mí, podéis pasar la batidora una vez terminado para dejarla a vuestro gusto.
Cómo hacer la mermelada de ciruelas al toque de lima con panificadora Thermomix o My Cook:
- Ponemos en la jarra el zumo de lima y el azúcar. Programamos 5 minutos, 100º, velocidad 3.
- Mientras se hace el almíbar, igual que en el caso anterior, preparamos la fruta. En este caso no habrá que tanto porque las propias cuchillas la triturarán: bastará con partirla a la mitad para sacar el hueso y quitarle el rabito.
- Añadimos la fruta y la ralladura de lima y programamos 30 minutos, 100º, velocidad 3.
Al terminar, podemos optar por triturar más la mermelada, si nos apetece (10 segundos, velocidad 10).
Cómo hacer la mermelada de ciruelas al toque de lima con el método tradicional:
- Ponemos el azúcar y el zumo de lima en una cazuela grande, igual que en los casos anteriores y, mientras se hace el almíbar, lavamos y troceamos la fruta.
- Añadimos la fruta y la ralladura de lima y dejamos cocer a fuego lento, aplastando la fruta con un tenedor para que vaya cogiendo textura, durante una hora, más o menos. Tendremos cuidado de remover con frecuencia para que no se agarre.
El resultado es una deliciosa mermelada de ciruelas ligeramente ácida, gracias a la lima, que combina perfectamente con una tostada de
pan de molde con un poquito de mantequilla.
Conserva tus mermeladas durante mucho tiempo:
En todos los casos, podemos envasar las mermeladas al vacío para que aguanten más tiempo. Como llevan azúcar y, ya lo comenté antes, el azúcar hace de agente conservante, bastará con llenar los botes elegidos, bien limpitos, hasta el borde, cerrarlos bien con tapas que estén en perfecto estado de conservación y darles la vuelta.
Se dejan boca abajo sobre un paño durante varias horas. Yo suelo dejarlos toda la noche. Al cabo de este tiempo, si el paño está limpio es que no ha habido fuga y el bote ha quedado perfectamente cerrado; comprobaréis al abrirlo que hace el clásico “plop” que indica que el vacío estaba hecho.
TODOS LOS TIPS PARA CONSERVAR VUESTRAS MERMELADAS CASERAS AQUÍ.
Aún así, a mí me gusta conservar las mermeladas en el frigorífico.
Si disfrutáis como yo haciendo mermeladas, os aviso, esta no será la última 😉 Mientras tanto, podéis ver otras que tengo en el blog. Pinchad en la imagen e iréis directamente a la selección.
Feliz fin de semana.
Hola, acabo de conocer el blog y me quedo en él, me está interesando mucho. Voy a seguir mirando, hay cosas muy ricas.
Un beso. Con sabor a huerto blogspot.com
¡Bienenida, Lola!
Ahora me paso a conocer tu blog porque lo de sabor a huerto me interesa muuuucho 😉
Besos.
Ummm, untadita en una tostada….me puedo imaginar su rico sabor.