Gofres de calabaza
Estos gofres de calabaza están tan pero tan tan ricos, que me vais a perdonar, estoy segura, por traeros otra receta más con las dichosas curcubitáceas.
Como ya os conté en Instagram, tenemos casi 20 calabazas en el trastero, entre las grandotas y las de cacahuete, así que hay que darles salida. Ya os iré contando algún plato salado en la que también usamos calabaza y queda genial, pero hoy os traigo unos maravillosos gofres de calabaza con cúrcuma que han triunfado en casa.
La cúrcuma no es imprescindible en esta receta. La he usado porque me gusta mucho el aroma y porque tiene muchísimas propiedades, sobre todo antiinflamatorias, antioxidantes y descongestionantes que la convierten en un aliado perfecto para tratar los signos de envejecimiento.
También se usa en cosmética para tratar el acné y la dermatitis, así como blanqueante dental. Curioso porque tiene un color amarillo muy intenso, pero oye, todo es probar.
De momento yo os dejo con la receta de los
gofres de calabaza con cúrcuma
Ingredientes
- 300 g. de calabaza asada (te explico más adelante cómo asarla)
- 150 g. de leche (o bebida vegetal)
- 50 g. de aceite de oliva virgen extra,
- 200 g. de azúcar,
- 650 g. de harina de fuerza,
- 2 cucharaditas de cúrcuma,
- 15 g. de levadura fresca de panadero,
- opcional: gotas de chocolate blanco o negro.
Receta #sinhuevo #sinleche y #sinlactosa (si usas cualquier bebida vegetal) y #sinffss
Comprueba los ingredientes de las gotas de chocolate si vas a usarlos.
Con estas cantidades salen unos 20 gofres.
Consejo: no hagas menos. Los gofres se congelan perfectamente. Cuando los quieras comer, basta con ponerlos en el tostador para que estén listos en 3 minutos.
Cómo hacer los gofres de calabaza con thermomix
- Como paso previo tenemos que asar la calabaza.
Puedes hacerlo en el horno durante 1 hora a 120ºC. Si ves que se dora demasiado, tápala con un papel de aluminio.
O puedes utilizar el microondas, mucho más rápido, metiendo la calabaza en un recipiente apto para el microondas. Yo uso el estuche de Lekué que es comodísimo y se limpia luego fenomenal:
- Otra opción es cocinar la calabaza en thermomix: en el vaso, pon la calabaza y un litro de agua. Programa 20 minutos, temperatura 100ºC, giro a la izquierda, velocidad cuchara.
Al terminar, Escurre el agua y quédate sólo con la calabaza. - Una vez asada la calabaza, quítale la piel y las pepitas y aplástala con un tenedor.
- Pon todos los ingredientes, salvo la levadura, en la jarra de la thermomix y amasa 5 minutos con la función espiga.
Comprueba que la masa es manejable, no excesivamente pegajosa, pero tampoco seca: va a depender de la cantidad de agua que tenga tu calabaza: las de cacahuete, por ejemplo, son más secas que las grandes.
Si la ves demasiado blanda, añade un poco más de harina (1 cucharada cada vez nada más) y si demasiado seca, un poco más de leche. - Añade la levadura desmenuzada y vuelve a amasar 5 minutos con la función espiga.
- Deja reposar la masa durante 1 hora u hora y media, hasta que aumente bastante su volumen.
Puedes dejarla dentro de la jarra o volcándola a un cuenco grande ligeramente aceitado. - Pasado el tiempo, vuelca la masa en la superficie de trabajo. Si quieres usar gotas de chocolate, ponlos sobre la masa y vuelve a amasar un poco para que se integren en toda.
- Divide la masa en porciones de 80-100 g.
- Calienta la gofrera y pincélala con un poco de aceite de oliva.
- Ve poniendo las porciones de masa sobre los huecos de la gofrera hasta que se despeguen fácilmente de ella.
Ojo: las planchas de la gofrera tienen que estar muy calientes; si no es así, la masa se quedará pegada y el gofre saldrá hecho un churro 😉
Los gofres están hechos cuando, al abrir la gofrera, se despegan fácilmente de sus planchas. - Ve dejando los gofres sobre una rejilla mientras vas haciendo los demás para que se mantengan crujientes.
Cómo hacer los gofres de calabaza con panificadora
- Asa la calabaza con cualquiera de las opciones explicadas más arriba.
- Aplasta la calabaza con un tenedor y ponla en la cubeta de la panificadora junto con todos los ingredientes, salvo la levadura y las pepitas de chocolate.
- Selecciona el programa de amasado y ve vigilando que la masa sea manejable, no excesivamente pegajosa, pero tampoco seca: va a depender de la cantidad de agua que tenga tu calabaza: las de cacahuete, por ejemplo, son más secas que las grandes.
Si la ves demasiado blanda, añade un poco más de harina (1 cucharada cada vez nada más) y si demasiado seca, un poco más de leche. - Una vez conseguida una masa manejable, añade la levadura y termina el amasado. Si es necesario, vuelve a programar el programa.
- Deja reposar la masa durante 1 hora u hora y media, hasta que aumente bastante su volumen.Puedes dejarla dentro de la cubeta de la panificadora o pasándola a un cuenco grande ligeramente aceitado.
- Pasado el tiempo, vuelca la masa en la superficie de trabajo. Si quieres usar gotas de chocolate, ponlos sobre la masa y vuelve a amasar un poco para que se integren en toda.
- Divide la masa en porciones de 80-100 g.
- Calienta la gofrera y pincélala con un poco de aceite de oliva.
- Ve poniendo las porciones de masa sobre los huecos de la gofrera hasta que se despeguen fácilmente de ella.
Ojo: las planchas de la gofrera tienen que estar muy calientes; si no es así, la masa se quedará pegada y el gofre saldrá hecho un churro 😉
Los gofres están hechos cuando, al abrir la gofrera, se despegan fácilmente de sus planchas. - Ve dejando los gofres sobre una rejilla mientras vas haciendo los demás para que se mantengan crujientes.
La gofrera
A mí me gustan las gofreras eléctricas. Hay quien usa moldes para el horno: cuestión de gustos.
Las eléctricas son una especie de sandwicheras que tienen las planchas con las típicas formas de los gofres. Al ser de metal y entrar en contacto directo con la masa, los gofres quedan con un toque crujiente que a mí me gusta mucho. Por eso las prefiero sobre los moldes para horno.
Yo tengo una de dos huecos (hace dos gofres a la vez). Si la eligiera ahora, y teniendo en cuenta que somos 4 en casa, compraría una con 4 huecos. Pero lo cierto es que la mía funciona perfectamente. Elige la gofrera que más se adapte a tus necesidades: las hay con planchas intercambiables que se convierten en sandwicheras, lo cual me parece una opción perfecta porque así tienes los dos electrodomésticos en uno; hay otras que hacen gofres en forma de flor o alargados en lugar de cuadrados, ¡será por variedad!
Si tienes tantas calabazas como yo y te apetece usarlas para hacer dulces, no puedes perderte:
¡Felices calabazas!