Caldo de verduras {olla rápida}
Un caldo de verduras es básico para cocinar muchas de nuestras recetas y, además, prepararlo en casa es muy muy fácil.
Cuando vayas a la frutería compra las verduras que más te gusten y prepara tu propio caldo de verduras casero en menos de media hora en tu olla express. Una vez listo y frío, puedes congelarlo. De esta manera lo tendrás siempre disponible para el momento en el que lo necesites.
También se puede usar una olla GM Deluxe y sólo habría que hacerlo siguiendo las instrucciones del fabricante en cuanto a tiempos y modos de cocción. Sobre los ingredientes, puede seguir las indicaciones que doy más abajo.
La cosa es tan fácil como te la estoy contando, pero no te preocupes porque te doy todos los detalles paso a paso más abajo.
Cómo hacer caldo de verduras casero
Ingredientes
- Las verduras que tú prefieras. Por ejemplo: 200 g. de puerro, 200 g. de zanahoria, 100 g. de repollo, 200 g. de calabaza o calabacín, 1 cebolla…
Elige las que más te gusten y las que estén de temporada. - 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra,
- 1 cucharadita de sal,
- 2 litros de agua,
- opcionalmente puedes usar una punta de jamón o una carcasa de pollo.
Sin embargo, a no ser que vayas a usar el caldo de verduras inmediatamente y sepas con exactitud en qué plato, yo no lo haría: si congelas un caldo de verdura al que has añadido carne, no te va a servir, por ejemplo, para hacer después un arroz con pescado o con marisco.
Si aún así decides hacerlo, asegúrate de etiquetarlo antes de meterlo al congelador para que no se te olvide.
Elaboración
Hoy vamos a hacer el caldo de verduras en olla rápida, porque supone un importante ahorro de tiempo y de energía. Pero si no tienes olla rápida o no quieres usarla, no te preocupes que te voy a explicar cómo hacerlo en olla tradicional porque es casi igual.
- Pelamos las verduras y las cortamos en juliana, ya veréis porqué. Reservamos.
- Echamos el aceite de oliva en la misma olla en la que vayamos a hacer el caldo de verduras.
- Cuando esté caliente (pero no hirviendo), incorporamos todas las verduras y salteamos ligeramente para que desprendan bien su aroma.
Si hemos decidido usar una carcasa de pollo, la saltearemos en el aceite unos minutos antes de añadir las verduras. - Salpimentamos al gusto e incorporamos todo el agua.
- Cerramos la olla rápida y esperamos a que suba la válvula. Una vez que haya cogido presión, dejamos cocer durante 10-15 minutos. Apagamos el fuego y dejamos la olla reposando hasta que pierda presión.
Siempre os lo digo, pero es que es muy importante respetar eso: no se abre una olla rápida ni una olla a presión hasta que la válvula haya bajado completamente y estemos seguros de que ha perdido toda la presión. - Ya sólo nos queda colar el caldo para retirar todas las verduras y tener nuestro caldito de verduras listo.
Si haces el caldo de verduras con olla tradicional, sigue todo el proceso ta cual, pero deja cocer las verduras durante una hora u hora y media, hasta que estén bien tiernas.
Sopa de verduras
¿Por qué os he dicho antes que pongáis las verduras cortadas en juliana para hacer el caldo de verduras?
Pues porque así, si en vez de usarlo para cocinar un arroz o cualquier otro plato que necesite caldo de verduras, puedes emplearlo para prepararte una sopa de verduras, consiguiendo así cena ligera.
Y si no, ni se te ocurra tirar las verduras: sirven para preparar un fantástico puré de verduras añadiéndole 2 o 3 cucharadas del caldo.
Ya ves que con una única preparación podemos hacer diferentes platos en función de lo que nos apetezca o necesitemos en cada momento 😉
Esta receta es apta para alérgicos al huevo, a la PLV y para intolerantes a la lactosa y al gluten.
Además, se trata de una receta apta para dietas vegetarianas y veganas.
Ya os he dicho que la receta del caldo de verduras es un básico en nuestras cocina. Tenerlo congelado nos asegura que en cualquier momento podemos cocinar una fideuá con alcachofas, un pollo en salsa o un risotto de champiñones.
