Pan de chapata
Receta del pan de chapata
- 490 gr. de harina de fuerza
- 10 gr. de harina de centeno integral
- 400 ml. de agua fría
- una cucharadita de sal
- 10 gr. de levadura fresca de panadero
- Opcional, 1/4 de cebolla caramelizada. Esto lo usé en una sola de las barras; la otra quedó “normal”, más al gusto de los cachorritos.
Cómo preparar el pan de chapata
{Actualización junio 2023}
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Elaboración de la masa y reposo en frío 8 horas:
En un cuenco amplio, mezclamos todos los ingredientes poniendo cuidado en que la levadura se disuelva bien y no quede ningún pegotón por ahí sin mezclar.
Estad muy pendientes para que tampoco quede parte de la harina sin humedecer.
Puede ser interesante disolver la levadura en un poco del agua, pero no la calentéis, como hace la gente. Necesitamos el agua muy fría.
Cuando nuestra mezcla esté homogénea, hacemos unos pliegues: cogemos una parte de la masa, estiramos un poco hacia arriba y llevamos hacia el centro.
Esta operación hay que hacerla desde los cuatro lados, pensando en nuestra masa como si fuera un cuadrado (aunque la hayamos metido en un recipiente redondo, ¡hay que echarle un poco de imaginación a la cosa!)
Tapamos con un papel transparente ligeramente aceitado -para que no se nos pegue si la masa crece más de lo previsto- y dejamos reposar en el frigorífico. Debe de estar ahí un mínimo de 8 horas. Yo la tuve unas 24 horas.
Plegados:
Pasado el tiempo de reposo, sacamos la masa del frigorífico; tiene que haber crecido bastante. Yo me la encontré así (¿véis que se ha desbordado y se me ha salido del molde?):
Volcamos la masa sobre un papel de hornear o, mejor, un mantel de silicona:
Volvemos a pensar en nuestra masa como si fuera un cuadrado y repetimos la operación anterior de los pliegues: tomamos la parte de la derecha, la levantamos hacia arriba y pegamos en el centro. Tomamos la parte de la izquierda, la levantamos y pegamos en el centro. Y hacemos lo mismo con la parte superior y la inferior. Se nos quedará así de plegadita:
Cuidado porque el manejo es complicado debido a lo pegajosa que es la masa. Yo no recomiendo mancharse las manos de harina antes de tocarla porque la masa termina por absorber la harina y se nos vuelve a quedar pegada en las manos. Es mucho más práctico mojarse los dedos con agua fría o, si como yo no soportas el frío en los dedos, con un poco de aceite de oliva.
Tenemos que continuar haciendo plegados y con reposos en frío durante un rato aún:
Cubrimos de nuevo con el papel film aceitado y devolvemos al frigorífico. Deberá reposar allí unos 45 minutos.
Sacamos del frigorífico y repetimos la operación de los plegados. Volvemos a meter al frigo y lo dejamos reposar de nuevo, unos 30 minutos.
Pasados estos 30 minutos, sacamos y repetimos los cuatro plegados. Si la masa sigue demasiado blanda, podemos repetir la operación una vez más.
Elaboración de las chapatas:
Sacamos del frigorífico, cortamos la masa en dos, le damos forma de barra y disponemos sobre una bandeja de horno y papel adecuado, dejándolo reposar otros 30 minutos, esta vez ya fuera del frigorífico.
Se trata de una masa muy blanda: si no tienes bandejas especiales para hacer chapatas, te recomiendo que lo dejes reposar en unos moldes de cake forrados con papel de horno.
Mientras tanto, vamos precalentando el horno a máxima potencia, en mi caso a 250º.
Horneado:
Metemos las chapatas en el horno, manteniendo la potencia a 250º durante 15 minutos, transcurridos los cuales lo bajamos un poco, a 230º. Horneamos durante otros 15 o 20 minutos hasta que estén tostaditas, sin llegar a quemarse.
Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Sugerencias sobre el pan de chapata:
Si queréis hacerlo así, tenéis que tener la cebolla caramelizada preparada con antelación y, llegado el momento de formar las barras de nuestras de pan de chapata, mezclarla con la masa teniendo cuidado de no amasar demasiado porque, como dije anteriormente, una de las cosas buenas que tiene este pan (además de lo rico que está) es que no requiere amasados.
Que rico, con lo que me gusta la cebollita caramelizada!!!! Y en esa foto con el aceite yo le pongo jamon y soy feliz, jeje!
Besitossssssssssssss
Hago muy a menudo chapatas para el desayuno pero con cebolla, tiene que estar de muerte!!!un abrazo!
Que pan más original!!! Y que buena pinta que tiene. Delicioso
Besotes
Madre mia otro pan para comerselo solito, este no necesita compañia, con esa cebolla tiene que tener un sabor espectacular. Mil besicos
Pero que bueno, con cebolla caramelizada, de lujo te ha quedado.
ay… que pinta más buena por favor!!! con esa cebollita… se me ha heccho la boca agua!
yo pensaba que para fermentar tenía que ser en ambiente cálido…..no veas todo lo que estoy aprendiendo en este grupo
un beso compi
No siempre Lidia. Los ambientes cálidos hacen que la fermentación sea más rápida y dependiendo del pan puede ser bueno retardar esa fermentación en lugares frescos o, incluso fríos, como ves en esta receta. Pero el hecho de que el levado se haga en frío hace que este tenga que ser mucho más prolongado: de ahí que tenga que estar al menos 8 horas en el frigorífico.
Un besazo.
Yo me quedo el de sin cebolla, que la cebolla no me va mucho jeje tiene un corte fenomenal, se ve delicioso
Para gustos, ya sabes… Así que sin cebolla para ti.
Hola Veronica!!!te ha quedado espectacular..y eso que la masa es muy pegajosa y hay que trabajarla mucho..felicidades..
Besets
¡Qué va! Al contrario, no es una masa que haya que mover, trabajar ni amasar demasiado. El resultado sorprende también precisamente por eso.
Que bueno, con lo que me gusta la cebolla caramelizada. Bss
Besos también para ti.
Que original el de cebolla caramelizada…. pero yo no tengo pacientcia para reposar 24 horas… la verdad que os admiro…
Al revés, Mar, el hecho de que tenga reposos largos a mí me permite organizarme. A diario no tengo tiempo de hacer panes que requieran estar demasiado pendientes de ellos porque también trabajo fuera de casa. Por eso me decanté por esta receta en particular para el desafío.
Pues si que la masa es bien pegajosa, pero el resultado es espectacular y encima relleno de cebollas, toda una delicia. Me gusta mucho como te quedo de aireado el pan, se ve en los agujeritos que lleva la miga. Y si podría ser una idea perfecta para hacerlo en verano sin preocuparnos por los levados.
Eso mismo pensé yo, que en el calurosísimo verano madrileño preparar este pan va a ser una gozada 😉
Me encantan las dos versiones, pero tengo que confesarte que el que lleva cebolla caramelizada, desde que lo vi, me robó el corazón… ¿puede robarte el corazón un pan? jeje
Un beso enorme.
Puede, puede robártelo 😉
Para allá que te mando una rebanadita.
Besazos.
Ñam ñam mmmmm si es que lo huelo, que rico se ve besotes
Estaba, estaba rico, sí.
Me encanta el aspecto q tiene y la q lleva la cebolla me atrae un monton pero q la masa sea tan pringosa me da un noseque…
Besinos
Es muy pringosa sí, pero no hay que toquetearla mucho: este pan se amasa mucho menos que cualquier otro (cualquier otro que yo haya preparado, que conste).
Besos.
Te han quedado estupendas. Me encanta la chapata y alguna vez la he hecho es genial para unos bocatas
Sí, menudos bocatas de merienda se metió el cachorrito mayor con estas barras (con la de sin cebolla, en realidad). Tienes razón.
La chapata es uno de mis panes favoritos, le has dado un toque espectacular.Besos.
Carmela, viniendo eso de ti, me parece un gran halago.
Gracias.
Madre mía, me has ganado con la cebolla caramelizada. Por Dios, qué bueno tiene que estar. Me lo apunto en "urgentes"
Besinos
Gracias.
Si lo haces, avísame (para que me dé envidia a mí de vuelta y vuelva a animarme jijiji)
Besos.
La cebolla caramelizada me gusta mucho asín que en el pan tiene que estar de vicio, una pinta riquísima. saludos. :-))
De vicio completamente.
Saluditos 😉
te ha quedado genial !!!!! impresionante con la cebollita…. uff q hambre
Sí, a mí también se me abrió el apetito de ver tanto pan rico rico.
No te preocupes de si es correcto el plural, que el nombre es lo de menos porque yo cuando he visto que llevaba cebolla caramelizada ya me ha conquistado
Veo que la cebolla ha triunfado, me alegro.
no soy muy amante de la cebolla pero la foto del corte con el aceite..qué hambre!!
Para ti un trocito sin cebolla.
Que conste que a mí la cebolla, en general, tampoco me va demasiado. Pero así, caramelizada, me encanta.
Que bueno, ademas me encanta la cebolla caramelizada 😉
Pues anímate, que tú también eres de panes, ¿no?
Me gusta mucho el toque de la cebolla carmelizada, aunque seguro que para mis cachorrillos como para los tuyos mejor sin ella. Un saludo.
Claro, por eso preparé una barra sin cebolla, por los cachorritos 😉
que rico con ese aceitito!!!!, y el de cebolla ya ni te cuento!! geniales!! bikossss
Sí, las dos variedades estaban muy ricas, pero el de cebolla tenía un toque especial.
Besitos.
Yo me quedo con la que lleva la cebolla,puedo imaginarme untada con paté o queso tiene que ser delicioso,me gusta mucho, yo también tenía ganas de empezar a hacer panes, y en este desafío vamos a aprender mucho….besitos
A aprender mucho y a tener multitud de recetas para continuar experimentando.
Una rebanada del de cebolla para ti.
No sé si será correcto el plural, pero lo que si me parece fantástico es ese relleno de cebolla caramelizada, chiquilla, con lo que me gusta
Besitos
Pues nada, ya sabes, una vez que una mete la zarpa en esto del pan, no hay manera de parar 😉