Cómo usar el té en la cocina
En España siempre ha habido más tradición hacia el consumo de café, sin embargo, desde hace unos años, la cultura del té ha ido en aumento y muchos disfrutan ya de esta sana y deliciosa bebida en cualquier momento del día. Pero, lo que muchos aún desconocen es que los distintos tés ofrecen numerosas posibilidades gastronómicas
El té es una bebida muy popular a nivel internacional que también es apreciada por el paladar de los españoles. Hay muchos tipos de tés y muchas maneras de consumirlo. Incluso, y esto es lo más sorprendente, utilizándolo como ingrediente en la elaboración de deliciosas recetas. Puedes encontrar tés de calidad para tus recetas en Aromas de te, la web de referencia en España en este sector.
Tipos de tés
Es sabido que el té es una bebida que cuenta con innumerables propiedades beneficiosas para el organismo y que se obtiene a partir de la planta Camellia sinensis. Las variedades más populares provienen de ella y va a depender de cuándo se cosechen las hojas y brotes y del tratamiento que se les dé, para conseguir el té verde, té rojo, té negro o el té blanco.
Propiedades del té verde
El té verde se elabora con hojas no fermentadas y es rico en vitaminas A, C, E y en minerales como el zinc, el cromo o el selenio. Ayuda en la prevención de la aparición de enfermedades degenerativas, la hipertensión y el colesterol, y en las dolencias cardiovasculares. También estimula el metabolismo, colaborando con las dietas de adelgazamiento. Es el tipo de té que contiene más antioxidantes.
Propiedades del té rojo
En el caso del té rojo las hojas han sido semifermentadas para su elaboración. Es un tipo de té que estimula el metabolismo de las grasas y ayuda a mantener en buen estado de salud el intestino, el hígado y los riñones. Resulta también muy aconsejable su consumo para las alergias, pues inhibe la liberación de histamina.
Propiedades del té negro
Sus hojas se han dejado oxidar y de él destaca su aroma y su alta cantidad de teína. Es excelente para cuidar la salud ocular, pues protege los capilares de los ojos.
Es un buen remedio natural conta la diarrea y tiene un efecto muy positivo contra la retención de líquidos.
Propiedades del té blanco
Es un té de color muy claro, pues las yemas utilizadas para su elaboración son de color plateado. Se cosechan antes de que se abran y se dejan secar. Se trata de una bebida rica en polifenoles, con una potente acción antioxidante, protege a las células del organismo de las agresiones de los radicales libres.
Este té proporciona mucha energía, tienen acción diurética, reduce los niveles de colesterol malo o LDL, combate las caries dentales, mejora las defensas y previene distintos tipos de dolencias. Además, por si todo esto fuera poco, mejora nuestra capacidad cognitiva, favoreciendo la memoria y la concentración.
Propiedades del té azul
También conocido como té oolong, se ha convertido en una de las variedades más valoradas por los occidentales. Tanto su sabor, reconocible y muy apreciado, como sus propiedades antioxidantes lo han destacado por encima del resto de tés. En concreto el té azul procede de Taiwan y es más fuerte que la producida en Fujian los dos orígenes que tiene este tipo de té.
Recetas con té
Cocinar con té es una forma muy interesante de enriquecer los platos y de descubrir nuevos sabores. Es más habitual su uso en repostería, pero en general es una oportunidad inmejorable para conocer un nuevo mundo de posibilidades culinarias.
El aspecto a tener en cuenta más importante es el mismo que al tomarlos en infusión: que el té sea de calidad, como el que se encuentra en la página web de Aromas de Té. El resultado de las recetas dependerá mucho de hacer una buena elección de estas hojas y plantas.
El té verde resulta un gran acompañamiento para las recetas de carnes blancas y verduras, combinando también a la perfección con platos de pescados. Por ejemplo, un wok de verduras y pollo acompañado de té verde puede convertirse en un auténtico plato gourmet.
El intenso sabor del té negro hace que combine bien con carnes rojas. Se puede utilizar la infusión de ese té par amarinar y suavizar la carne o como fondo de un guiso, sustituyendo al agua.
Queda muy bien también utilizado para aromatizar mantequillas, con el chocolate negro o utilizado para hidratar frutas secas. Picado muy fino, es un excelente sazonador, espolvoreado sobre la carne.
El té blanco es de un sabor mucho más delicado y queda perfecto en ensaladas, siendo utilizado en bastantes ocasiones como una especia. También se pueden elaborar unas patatas aliñadas muy diferentes a lo habitual hirviéndolas en su infusión.
El té rojo combina muy bien en salteados de hongos o setas, guisos de pescado, guisos de pavo o pollo, salteados de verduras y asados.
Receta de tarta de queso, lima y té matcha
Esta receta es realmente deliciosa para aquellos que quieran empezar a introducir el té en sus platos, pues con las recetas de postre tendrán un dulce y acertado comienzo.
Se necesita 100 gr de mantequilla o margarina, 200 gr de galletas tipo María, 1 tarrina de queso para untar, 6 hojas de gelatina, 2 huevo, 200 ml nata para montar, el zumo de 2 limas, 180 gr de azúcar y el ingrediente secreto, 2 cucharadas de té matcha.
Para comenzar, hay que elaborar la base de la tarta, triturando las galletas y mezclándolas con la mantequilla derretida (aquí os cuento algunos trucos para hacer las bases de las tartas). Esta mezcla se pone en un molde para tartas engrasado y se mete en el frigorífico. Después, se hidratan, mientras en un bol se baten los huevos junto con el azúcar, incorporando el queso crema, la nata, el zumo de lima y el té matcha, sin dejar de remover en ningún momento. Cuando está todo bien mezclado se añade la gelatina y se vuelve a remover.
Finalmente, se vierte la masa sobre la base de galleta del molde y se deja en el frigorífico durante tres horas, como mínimo.