Garbanzos con atún
Garbanzos con atún.
Es que no sé qué nombre ponerle a este plato porque no es exactamente un guiso porque le falta el caldito, aunque los garbanzos están guisaditos. Tampoco es un plato frío porque a mí las legumbres en frío no me convencen, pero no se puede decir que sea un plato caliente, porque lo comí templado, aunque se puede comer caliente.
Así que he tirado por lo sencillo y descriptivo: garbanzos con atún me parece bien, no sé si vosotros tenéis alguna sugerencia.
Garbanzos con atún
Os voy a dar dos versiones de esta receta. En realidad, os voy a decir dos caminos para llegar a un resultado parecido para que podáis elegir uno u otro en función del tiempo del que dispongáis.
En general, yo prefiero cocer los garbanzos en casa para cualquier receta que los lleve. Pero reconozco que a veces es complicado organizarse o se nos ha olvidado. Para estas ocasiones, una buena conserva nos va a ser de mucha utilidad y nos va a evitar lanzarnos a la comida rápida de la mala por falta de tiempo y de ingredientes.
Procurad tener conservas de calidad siempre en vuestra despensa. Y variadas, no nos ayuda tener sólo aceitunas y bonito. Legumbres, alguna verdura y veréis qué bien os viene.
Ingredientes
- 300 g. de garbanzos (peso en seco)
- 500-600 g. de atún en trozos.
- 1 cebolla,
- 2 hojas de laurel,
- aceite de oliva y sal.
Ten en cuenta que estas cantidades son aproximadas. Normalmente yo no uso peso cuando cocino en este tipo de recetas.
Los garbanzos
Para preparar este plato de garbanzos con atún, podéis cocer los garbanzos en casa o utilizar un bote de garbanzos cocidos.
Para cocer los garbanzos en casa, es necesario dejarlos en remojo con abundante agua y una cucharadita de sal al menos durante 8 horas.
Pasado este tiempo es conveniente escurrirlos y lavarlos. A continuación los pondremos en la olla que vayamos a usar con agua que los cubra aproximadamente un dedo por encima. Añadiremos una cucharadita de sal y un par de hojas de laurel.
En función del método elegido para la cocción, así será el tiempo que necesitemos:
- en una olla tradicional al fuego, aproximadamente unas 2 horas. Habrá que ir comprobando el agua porque es el método en el que mayor evaporación hay. Tal vez necesitéis añadir un poco más al principio o durante la cocción para que no queden secos y puedan agarrarse al fondo.
- en olla rápida, con 20 minutos desde que sube el pitorro que indica que la olla ha llegado a la presión necesaria, es suficiente. Pasado este tiempo habrá que apagar el fuego y esperar que el sistema de seguridad de cada olla nos permita abrirla.
- también podemos usar olla lenta. En ellas, el tiempo de cocción varía mucho en función del tipo de garbanzo. Calcula entre 10 y 12 horas. Los que yo compro, tardan más tirando a 12, pero a partir de la décima hora podéis ir comprobando si están tiernos o si necesitan una horita más.
Garbanzos en conserva
Ya hemos dicho que podéis usar garbanzos en conserva si no tenéis tiempo o ganas de cocerlos en casa. Para ello, debemos escurrirlos bien, a mí no me gusta consumir el líquido del bote de conserva. Prefiero escurrirlos y lavarlos antes de usarlos.
El resto de la receta
Mientras los garbanzos se cuecen, nos ponemos con el resto de la receta:
- Corta la cebolla en rodajas muy finas.
- Calienta 2 cucharadas de aceite en una sartén y pocha la cebollita a fuego muy bajo hasta que esté ligeramente caramelizada.
- Retira la cebolla y, en el mismo aceite (añade más si crees que es necesario), sella los trozos de atún por todas sus caras. Si te gusta, puedes pasarlos previamente por harina especial para frituras de pescado.
No olvides salpimentarlos a tu gusto previamente. - Cuando tengas todo el atún listo, añade a la sartén los garbanzos ya cocidos, incorporando el caldo justo para que el atún termine de cocinarse. Con 5 o 10 minutos será suficiente.
Si has usado garbanzos en conserva, como hemos retirado el líquido, en este punto puedes añadir un poco de agua o caldo de pescado o de verduras. Con un vaso tendrás suficiente.
- Antes de que finalice el tiempo, pruébalo para rectificar el punto de sal si fuera necesario.
- A la hora de servir, corona cada plato con un poco de la cebolla pochadita que habías reservado.
¡Espectacular!
Este plato de garbanzos con atún es perfecto para dejar preparado con antelación e ir comiendo entre semana cuando puede que tengas menos tiempo para cocinar. O para llevarlo en el táper al trabajo porque, como dije al principio, se puede comer caliente o templado.
O puedes comerlo recién hecho, jugoso y absolutamente delicioso.
Si te gustan las legumbres, tengo un montón de recetas para ti en el blog. Y si lo que necesitas son ideas para llevar en el táper, mira cuántas cosas de las que cocino me llevo al trabajo a diario: ver las recetas para el táper.
¡Feliz recién estrenado otoño!
Un guiso delicioso
Un plato delicioso, sin duda ☺️
Los garbanzos están ricos de todas las maneras, con atún seguro que super.
Un abrazo
Concha