No voy a entrar en su recolección porque no soy experta en ello. Si os decidís a recogerlas vosotros mismos, sed muy precavidos porque algunas especies pueden ser muy venenosas y poner en peligro, incluso nuestra vida.
Si no sois expertos en la materia, siempre podéis comprarlas frescas, secas o en bote. Siempre que podáis y estemos en temporada, mucho mejor frescas, claro: su sabor y todas sus propiedades serán mucho más apreciables, pero las secas dan muy buen resultado.
Y, puestos a recogerlas vosotros mismos, los níscalos son los más sencillos de identificar y, por tanto, los más recomendables para los principiantes. Su inconfundible color anaranjado intenso hará que los distingas perfectamente de cualquier otro tipo de seta; ya sabes, ante la duda, no la recojas.
Pero sí os puedo enseñar como cocinar algunas setas, así que mirad a continuación las 4 recetas con setas tan ricas que os propongo hoy:
4 recetas con setas
Precisamente, la primera receta que os traigo hoy es un sencillísimo pollo asado con níscalos. El intenso sabor y color de los níscalos, del que ya hemos hablado antes, hace de este plato digno de un menú de fiesta.
A los ingredientes usuales para hacer pollo asado se le añaden los níscalos y alguna hierba aromática a elección del cocinero y de los comensales. Basta con hornear el pollo hasta que esté dorado a nuestro gusto para obtener un plato sencillo y muy rico.
Otra magnífica forma de preparar las setas es, simplemente, empanarlas. Así nos lo enseñan desde el blog Cocina con Reina. Basta con tener la setas bien limpias, empanarlas en una mezcla de huevo y pan rallado, para después freírlas en aceite bien caliente para obtener un fantástico aperitivo otoñal.
Otra forma de cocinar las setas que me ha encantado ha sido en risotto. La verdad es que esta forma de cocinar el arroz es todo un acierto por la cremosidad del plato y el intenso sabor de las setas que, además, en el blog Cuadernos de cocina combinan con queso de tetilla, ¡un plato de lujo! No os perdáis
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