Potaje de alubias carillas {con crujiente de puerro y calabaza}

Desde que mi amiga Isa Reina me descubrió las alubias carillas, hace unos años ya, esta legumbre se ha convertido en una de las imperscindibles en casa y en la favorita del cachorrito mayor.

Las carillas, alubias carillas, judías de careta o chicharro, reciben infinidad de nombres en función del territorio, pero casi todos hacen referencia a la mancha negra que estas judías tienen en uno de sus laterales y que parecen una careta.

Se trata de una variedad más fina y suave que las alubias “normales”, por lo que necesitan un menor tiempo de cocción y también se digieren mejor.

Receta del potaje de alubias carillas con crujiente de puerro y calabaza

Ya os he dicho que son unas de las legumbres favoritas del cachorrito mayor. Él no concibe un potaje de legumbres sin su chorizo y su jamón, pero de vez en cuando yo me atrevo a cocinar legumbres de una forma más saludable. Como en esta ocasión, en la que las alubias carillas van acompañadas de puerro y calabaza. Podría ser un plato totalmente vegetariano si no fuera por los trozos de costilla que le añadí para compensar la ausencia de embutidos. Y es que una intenta educar a sus cachorritos en una alimentaicón saludable, pero de ahí a osar desencadenar una tormenta por ausencia de carne con las legumbres… ¡no soy tan valiente! Bastante es que prescindí, con éxito, del chorizo y el jamoncito.

Pero, si queréis, podéis pasar de las costillas o sustituirlo por un cuarto de pollo para hacer este plato aún más ligero. Desde luego, sin la carne está buenísimo también. Os lo digo yo que no me la comí (aunque el regustillo ya estaba en el caldo…)

Olla rápida

Yo suelo cocinar las legumbres con olla rápida porque reduce el tiempo de cocción y, por tanto, el gasto energético. Pero os explicaré cómo hacer esta receta también en una olla tradicional.

 

Ingredientes

• 300 g. de alubias carillas
  (peso en seco y aproximado: jamás peso las legumbres cuando las voy a cocinar, sino que lleno el cuenco donde las voy a remojar un poco a ojillo)
• 2 puerros medianos,
• un trozo de calabaza, unos 500 g.,
• 3 dientes de ajo,
• 5 o 6 costillas de cerdo, dependiendo de la cantidad de carne que exijan vuestros comensales.
• aceite de oliva,
• sal,
• 2 hojas de laurel,
• otras verduras para el sofrito: tomate maduro, pimiento, calabacín…

Lo bueno de estos guisos es que te permite usar una gran variedad de verduras y dar así salida a las que puedas tener en la nevera esperando su turno o que, a lo mejor, te han sobrado de otros platos.

Cómo hacer el potaje de alubias carillas: elaboración

Paso previo: remojo

Como casi todas las legumbres, las alubias carillas necesitan un remojo previo a la cocción. Lo más cómodo es, si vas a cocinar por la mañana, dejar las carillas en remojo la noche anterior con una o dos cucharadas de sal.

Lava las alubias antes de dejarlas en remojo bajo el grifo y luego cúbrelas bien de agua.

Calcula unas 8 horas de remojo, aunque pueden ser 6 si tienes prisa.

 

 

El guiso:

1. Escurre las alubias carillas remojadas.
2. Mientras, pela y pica las verduras. Resérvalas. Guarda medio puerro y 4 o 5 cucharadas de calabaza para hacer el crujiente. El resto lo usaremos para el sofrito.
3. Calienta en la misma olla en la que vayas a cocer las carillas, un par de cucharadas de aceite de oliva. Añade los ajos y retíralos cuando empiecen a estar dorados. Incorpora en ese momento el resto de las verduras y sofríe hasta que empiecen a ablandarse.
4. Añade un vaso de agua y tritura todas las verduras con ayuda de una batidora si eres de los que no quiere encontrar trozos en el caldo de las legumbres. Esto es especialmente útil en el caso de los cachorritos que suelen hacer ascos a cualquier cosa que flote y tenga una textura diferente. Al menos los míos, eh… De esta manera se comen todito sin rechistar.
   Pero reconozco que no lo hago sólo por ellos: yo también prefiero un caldo trabadito y ligeramente espeso sin tropezones.
5. Incorpora las legumbres y las costillas si has decidido usarlas, junto con 1/2 cucharadita de sal.
6. Cubre con agua y cierra la olla.
7. Si es una olla rápida, espera a que suba la válvula para calcular 10 minutos de cocción. Apaga el fuego y deja la olla sobre la vitro caliente hasta que la válvula haya bajado por completo y la olla haya perdido toda la presión.
   Si es una olla tradicional, deberá cocer una hora y media más o menos. Pero ve controlando el punto de las alubias para que no queden duras ni se deshagan.
8. En una sartén a parte, con una cucharada de aceite, dora los trocitos de calabaza y los aros de puerro que habíamos reservado hasta que estén doraditos y crujientes (la calabaza crujirá menos). Sírvelo aparte para que cada comensal pueda ponerse un poquito sobre su ración, ¡a mí es la parte que más me gusta! y el contraste de texturas me fascina.

Una vez terminado el guiso, si te gusta que el caldo esté más espesito, puedes apartar un cazo o dos de alubias carillas y pasarlos por la batidora. Luego se incorporan de nuevo a la olla.

Receta apta para alérgicos al huevo, a la PLV, a los frutos secos, para celiacos y para intolerantes a la lactosa.

 

Si sobra potaje de alubias carillas:

A mí me gusta mucho hacer ollas muy grandes de este tipo de guisos. Solemos consumir más o menos la mitad recién hecho. La otra mitad la congelo. De esta manera, un par de semanas después, vuelvo a tener una comida nutritiva, saludable y muy rica sin esfuerzo. Puede servirte para comer un fin de semana después de un paseo sin tener que estar pendiente de cocinar puesto que la comida ya está hecha o para llenar el táper diario sin tener que improvisar todos los días.

¿Y tú? ¿sueles congelar las legumbres?

 

 

 

Otros potajes de legumbres de esta web:

• Lentejas estofadas, las tradicionales.
• Potaje de lacón con grelos.
• Cocido madrileño con bola.