Frittata de brócoli

El brócoli es una de las verduras que mejor se comen los cachorritos. Casi todas las semanas cae un brócoli y casi siempre cocinado de la misma manera porque es como a ellos les gusta. En esta ocasión soy yo la rarita: me cuesta mucho tomarme el brócoli. Por eso procuro buscar otras formas de cocinarlo. Y así, leyendo una revista atrasada de thermomix, fue como decidí cocinar esta frittata de brócoli.

La frittata es un plato italiano que está a medio camino entre la quiche francesa y la tortilla española. Se trata de un plato a base de huevos con cualquier tipo de relleno; la clásica es la frittata di cipolle, un plato humilde de campesinos. Comparte con la quiche tanto la forma como el aspecto y el hecho de estar enriquecida con nata o leche, además de una multitud de rellenos; sin embargo, la frittata no lleva la base de masa quebrada de aquélla y su textura es más esponjosa y aireada.

Como yo soy muy de verduritas en la cena porque el menú del cole cojea un poco en este punto, nuestra frittata sólo podía ser una excusa para vestir las verduras de otra manera.

Lo cierto es que obtuvo un éxito dispar: tanto al cachorrito mayor, poco amante de tortillas y huevos y por quien yo apostaba poco, como al papá de los cachorritos y a mí, nos encantó. A mí me parece una cena rápida, fácil y nutritiva. Tal vez poco contundente para lo que mi cachorrito mayor necesita a sus casi 13 años, pero eso lo solucioné con una buena ensalada de tomate y pepino que, aunque no os lo podáis creer, él adora.

Sin embargo, la cachorrita pequeña, que muere por cualquier plato a base de huevos, no estuvo muy contenta con el resultado. Pero no se lo tengáis en cuenta: mi niña es así y todo su afán, consciente o inconsciente, en todo, siempre y ante cualquier situación, es llevarte la contraria. Estoy convencida de que pasado mañana sirvo otra frittata en la mesa y muere del gusto.

Receta de la frittata de brócoli

Ingredientes:

• 200 g. de cebolla o cebolleta.
• 300 g. de brócoli (sólo las flores, sin tallo que podemos reservar para otras preparaciones)
• 20 g. de aceite de oliva (2 o 3 cucharadas)
• 4 huevos medianos
• 40 g. de queso paremesano en polvo
• 50 g. de nata (yo la sustituí por leche sin lactosa por aligerar y por hacer de la frittata un plato apto para la cachorrita intolerante)
• hierbas aromáticas al gusto: albahaca, tomillo…
• un pellizco de azafrán
• sal y pimienta al gusto.

Cómo hacer la frittata de brócoli con thermomix:

1. Ponemos en el vaso la cebolla o cebolleta partida en cuartos, junto con las hierbas aromáticas y el aceite. Troceamos 3 segundos, velocidad 7.
   Si quieres los trozos de cebolla más finos, aumenta el tiempo a 10 segundos o hasta que estén a tu gusto.
2. Bajamos los restos de alimento hacia el fondo de la jarra y añadimos las ramitas de brócoli lavadas y secas. Sofreímos 5 minutos, 120º, giro inverso, velocidad cuchara. Retiramos y reservamos.
3. Sin lavar la jarra incorporamos los huevos, el queso rallado, la leche o la nata, el azafrán, la sal y la pimienta. Batimos: 10 segundos, velocidad 4.
4. Añadimos los huevos al recipiente donde teníamos la verdura reservada y mezclamos.
5. Engrasamos ligeramente un molde redondo bajo, como de quiche y vertemos en él la mezcla de la frittata. Horneamos a 180º (calor arriba y abajo, sin aire) entre 15 y 20 minutos.

Cómo hacer la frittata de brócoli sin thermomix, a la manera tradicional:

1. Picamos la cebolla o cebolleta junto con las hierbas aromáticas. Podemos hacerlo a cuchillo o con la ayuda de una picadora.
2. Sofreímos la cebolla picada en una sartén con un par de cucharadas de aceite hasta que comience a blanquear. En ese momento, añadimos las ramitas de brócoli lavadas y secas y las salteamos durante unos minutos. Reservamos.
3. Batimos los huevos, el queso rallado, la leche o la nata, el azafrán, la sal y la pimienta y mezclamos con la verdura.
4. Engrasamos ligeramente un molde redondo bajo, como de quiche y vertemos en él la mezcla de la frittata. Horneamos a 180º (calor arriba y abajo, sin aire) entre 15 y 20 minutos.

La frittata de brócoli se puede comer recién hecha aún calentita, pero está divina también al día siguiente, ya templada, por lo que es una opción ideal para llevar en el táper a la oficina. Si puedes volver a calentarla con un golpe de microondas, estará riquísima, pero si no tienes esa posibilidad, os aseguro que está muy buena también del tiempo. Para tener una comida completa fuera de casa, podéis acompañarla de una ensalada o de un plato de pasta.

Y si necesitáis más ideas para cocinar el brócoli, os sugiero:

• Pesto de brócoli. Yo lo congelo en porciones individuales que luego me sirven para tener mi comida de táper lista en el tiempo que tarda en cocerse la pasta, una opción que me ha salvado muchas veces.
• Quiche de brócoli y salmón ahumado.
• Milhojas de brócoli y espinacas.